Por Antonella Lettier
Se imaginan ¿estar tan entusiasmado por ir a una fiesta que hacés de todo para conseguir plata para pagar la entrada? Pensás que la vas a pasar muy bien con tus amigos, tu novio o novia y muchas personas más, pero tomás una muy mala decisión y es comprar una “pasti” que se supone que te “la va a subir” y hacerte creer que sos la persona más feliz del mundo por un rato, decís “no va a pasar nada” y te convencés. Ese es el momento en que VOS MISMO decidiste tomar algo que puede llevarte a tu propia muerte, o sea sería como cavar tu propia tumba.
Después de lo que pasó en la famosa TIME WARP, me puse a pensar lo que significa tomar una decisión que conlleva un GRANDISIMO riesgo, nada más y nada menos que terminar con tu vida por un momento de felicidad. Personalmente, no estoy a favor de las drogas, pese a esto entiendo el derecho de cada persona a decidir qué hacer con su vida mientras no se inmiscuya en la de los demás, y sobre todo teniendo en cuenta que los jóvenes que murieron y los que están aún en peligro internados, tenían la suficiente edad y capacidad mental como para tomar sus propias decisiones acerca de su salud. Sin embargo, en mi opinión, si bien ninguno tuvo en miras la muerte como posible consecuencia, al elegir tomar “SUPERMAN” y otras drogas se suicidaron.
Desde el día de la tragedia, diversas posiciones de los periodistas de la tv, de los padres de las víctimas y de los funcionarios públicos incendiaron los programas. La mayoría de ellos coinciden en que los jóvenes fueron víctimas, pero ¿de qué? Estoy de acuerdo que si fueron y, seguimos siendo todos los argentinos personas vulnerables ante el gran avance del narcotráfico pese a que numerosos políticos sigan insistiendo que la Argentina es sólo un país de tránsito y no de producción de drogas y de gran oferta y demanda. Sin embargo como lo recalqué numerosas veces creo que, además de imputar a los que vendían drogas por venta de estupefacientes, o en caso de no estar tipificadas estas pastillas como tales, serian consideradas sustancias toxicas; no puede culparse a cualquier persona por homicidio, el cual es un delito gravísimo en el código penal argentino que puede llegar hasta cadena perpetua por sus agravantes, cuando una persona con autonomía propia decide exponerse a un gran riesgo como es consumir drogas. Por lo tanto, la investigación y estudio criminalista y de la justicia deberán ser muy exhaustivos y precisos para determinar que delito TIPIFICADO específicamente cometieron los numerosos imputados, ya que pese al fervor social por encontrar un culpable, la justicia no puede castigar por un “delito inventado” a nadie por las garantías constitucionales de nuestro país.
En cuanto al narcotráfico, nuestro gobierno debe darnos alguna solución, ya que son los que están encargados de representarnos y protegernos al pueblo, pero también todos podemos ayudar a que esto se termine porque como todo comercio, para subsistir necesita de demanda y si no la hay dejará de ser un negocio envenenarnos con estas sustancias.
Por último quiero expresar mi gran preocupación por todos nosotros, que somos jóvenes y que a veces no tomamos decisiones mirando las consecuencias, que incluso pueden llegar a la muerte, como en este caso, y dejamos a nuestras familias que carguen con todo el peso. Cada noche que salimos nuestros padres duermen con un ojo abierto y el otro cerrado, esperando al levantarse al otro día que estemos en nuestras camas sanos y salvos, porque conocen los peligros que hoy en día hay en nuestra sociedad. Muchos de estos peligros los podemos evitar con buenas elecciones. No estemos dispuestos a morir en un intento de pasarla bien, seamos conscientes que por una simple mezcla extraña que hagamos o una pastilla que nos la vendan como inofensiva podemos dejar de existir. Y creo que ninguno está dispuesto a morir en el intento de disfrutar una noche de música y mucho menos a ver sufrir a nuestras familias, como las de los jóvenes fallecidos en la Time Warp, por querer “subirnos el ánimo un rato”. En esos cinco minutos en los que pensamos si drogarnos o no decidimos nuestro futuro.
“La droga es el producto ideal...La mercancía definitiva. No hace falta literatura para vender. El cliente se arrastrará por una alcantarilla para suplicar que le vendan...El comerciante de droga no vende su producto al consumidor, vende el consumidor a su producto. No mejora ni simplifica su mercancía. Degrada y simplifica al cliente.” William Burroughs
No te parece que se debería condenar a los que consumieron tambien? qué hacia un menor de edad consumiendo drogas en una fiesta? quienes son los culpables, los padres o la misma sociedad?
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